Tecnoteca: ambientalista advirtió su impacto sobre el arbolado
Según sostiene, hasta podría dañarse con los trabajos una higuera de la casa de la madre de Domingo Faustino Sarmiento, traída desde San Juan.
La Plaza Cívica se destaca por tener uno de los pulmones verdes más variados en materia de arboleda y plantas. Y hoy, la obra de la Tecnoteca pone en alerta a los ambientalistas que advierten que su construcción pone en riesgo este valioso patrimonio natural. No obstante, desde el municipio aseguran que se hará una modificación en medio de la obra que ya inició.
Ambientalistas sostienen que sobre el sector de Bv. 9 de Julio, la obra obligaría a retirar más de 20 árboles y causaría daño a otra decena de especies, entre ellas un ceibo, dos especies declaradas de interés municipal como el retoño del pino de San Lorenzo y la higuera de la casa de doña Paula, la madre de Domingo Faustino Sarmiento, traída desde San Juan.
Historia
La ecologista Ernestina Saravia recorre la plaza y toca los árboles, como acariciándolos. Los contempla y reflexiona: "Para que los proyectos no tengan fracaso deben tener tres cualidades: pensar, reaccionar y accionar. Si solo accionamos en estos proyectos destruimos toda una historia y todo un pasado en cualquier lugar y en cualquier momento".
"Más allá del valor histórico que tiene este espacio hay que
tener en cuenta que es un colchón pulmonar natural que tienen todos los
edificios que se encuentran en la Plaza Cívica"
Según Saravia, en el sector donde está previsto en primera instancia emplazar la Tecnoteca -que tendrá una superficie de 2.700 m2- se removerían varios árboles: un roble europeo, el retoño de pino azul de San Lorenzo- único en su tipo, que es patrimonio de interés municipal según la ordenanza Nº 4429- , varias tipas, un algarrobo europeo, entre otros.
"Serían más de 20 árboles los que se quitarían para esta obra", advierte. En tanto, "según pude saber, a los algarrobos no se los va a tocar, pero están dentro del obrador", dijo.
Patrimonio histórico y natural
Estos ejemplares arbóreos en la Plaza Cívica tienen entre 90 y 100 años de existencia, lo que imposibilita su traslado. "Hay que podarlos, hacerles un marco", sugiere.
Y explica que "para que un árbol o una planta cumpla con su función biológica, deben pasar entre 5 y 10 años. Las que se coloquen aquí para reemplazar a las que van a sacar, deben tener al menos 20 años de vivero para que en 10 años más cumplan con su tarea natural", avisa.
"No
hay conservación ambiental"
"La única plaza que se puede comparar con la nuestra es la de Rafaela, en la provincia de Santa Fe, que nos supera ampliamente por su cuidado y arboleda, porque nosotros no tenemos conservación ambiental", cuestiona Saravia.
A la remoción de los árboles se suma el daño inevitable de otra serie de plantas y arbustos que se ubican en cercanías de la obra de la Tecnoteca.
Uno de ellos es el retoño de la higuera de la casa de doña Paula, en el Rincón de los Símbolos y un ceibo que también va a ser "tocado" por la mano del hombre, ya que uno de sus gajos se inserta naturalmente en la obra. "Aunque no los saquen, las máquinas siempre van a destruir", sostiene la ambientalista.
También sentirían el impacto de la obra una tipa Verá joven, de unos 30 años, y un arbusto de campanillas japonesas.
El ejemplar que vivió en la casa materna de Sarmiento tiene 216 años pero el retoño se plantó en nuestra ciudad hace aproximadamente 90. Según Saravia, "si bien se va a construir al lado de éste árbol, es inevitable que las máquinas o en el proceso de construcción, no sufra daño".
Contaminación auditiva
Más allá del valor histórico que tiene este espacio hay que tener en cuenta que "es un colchón pulmonar natural que tienen todos los edificios que se encuentran en la Plaza Cívica, que son más de diez, sin contar el hotel Libertador y los bancos. Además, los árboles son una barrera para el sonido, por eso, al retirarse los ejemplares los vecinos escucharán más el ruido de la calle", pronostica Saravia sobre la contaminación auditiva.
Cambios
Ante los reclamos de vecinos del sector, quienes planearon una "abrazo solidario" a las especies que iban a ser sacadas -luego dieron marcha atrás-, desde el municipio advirtieron que junto al Colegio de Arquitectos realizarán cambios, entre ellos un nuevo espacio verde que se ubicaría entre el edificio de la Tecnoteca y la parte posterior del hotel Libertador, con la colocación de más ejemplares.